Ya había amanecido cuando recordé todos mis dilemas, me bañe y después me aliste para ir a la escuela, lugar donde no quería ir, no quería volverme a encontrar con Ángela, desayune muy rápidamente y me fui para mi colegio.
Cuando llegue estaba en la puerta Ángela, trate de irme por otro lado pero ella me alcanzo:
-Oye a donde crees que vas?-
-A un lugar donde no estés.
-Mira ni creas que esto se va a quedar así, no pues me quitas mi novio y yo me quedo bien tranquila
-Hay ya mira me canse de que me fastidies con el cuento de tu novio, ademas no tengo la culpa de que el ya no te quiera no es mi problema.
-Mira es la ultima vez que te advierto que te alejes de el o si no...
-O si no que? mira yo no te tengo miedo
-Pues entonces nos encontramos a la salida...
-Hay lo siento mucho pero yo no soy de esas que les gusta pelear te equivocaste de chica y sabes déjame en paz
Estaba furiosa pero debía recordar mis principios, me fui y la deje hablando sola. Llegue a la clase de español, la que me tocaba con Felipe, el ya estaba sentado en nuestro puesto.
-Hola
-Hola
-Que te pasa, te ves enojada?
-Nada
-Como que nada por nada uno no se enoja
-Mira me canse de tu noviesita, sabes podrías decirle que me deje en paz
-Como así Ángela te volvió a fastidiar, tranquila hoy mismo hablo con ella
-Eso espero
-Te propongo que hagamos algo para que te calmes
-Si dime
-Que tal si nos fugamos de clase?
El me había propuesto algo que nunca hubiera echo pero lo podríamos hacer por que el profesor aun no había llegado, estaba tan furiosa que decidí aceptar para relajarme
-Bueno, pero como saldremos
-Yo se por donde, vamos
Salimos de clase y el me llevo a un lugar, detrás de la escuela, allí habia una malla y la saltamos juntos.
-Listo somos libres
-Si, pero tengo un poco de miedo, imagínate donde noten que no estamos
-Tranquila, te llevare a un lugar donde no recordaras nada y te divertirás mucho
-Bueno, confió en ti
Empezamos a caminar por una calle larga, y llegamos a una pista de moto cross
-No pretenderás que monte en una cosa de esas cierto?
-Como que no, es un muy buen deporte, ademas la adrenalina es mucha y es muy buena.
-Ni loca!!
-Bueno pues si quieres me miras y luego decides si?
-NO!! por favor no lo hagas, te puedes matar.
Mis ojos se aguaron, no sabia pero al parecer iba a llorar, el me abrazo y me dijo
-Hay hermoza, no llores, yo practico esto desde hace 3 años, estaré bien
Me sonroje, el era todo un experto, se fue y se cambio, y cogió una moto, era de color rojo con negro, empezó a hacer saltos cortos pero luego saltos altos y largos, mi corazón estaba a mil, tenia miedo que algo le pasara, aunque se veía muy bien haciendo eso, había olvidado por completo la escuela.
-Bueno es tu turno, quieres practicar?
-Por si no te has dado cuenta estoy en falda
-Yo te presto un atuendo adecuado
-Bueno
Me cambien por unos jeans y me coloque la protección, el me presto su moto yo me monte y empece a sentir mariposas en el estomago, estaba muy nerviosa, estaba temblando, el me explico como manejar la moto y me dio un beso en la mejilla según el, me daría buena suerte.
Arranque en la moto, no parecía tan difícil, hasta que la moto se acelero demasiado y me estrelle contra una montaña de tierra.
-Lucy estas bien?
Veía todo nublado pero no sentía ningun dolor, sentí que alguien me cargo y después de eso no recordé nada mas
Cuando abrí los ojos estaba en la clínica al parecer me había roto la cabeza, por que sentía que me dolía mucho, en la habitación estaba Amanda, estaba dormida que horas serian, ella abrió los ojos y me dijo
-Lucy como te sientes?
-Perdóname
-Estoy algo decepcionada de ti pero de eso hablaremos en la casa
-Donde esta Felipe?
-Afuera, este chico no hace si no preguntar por ti y eso que le dije que se fuera a dormir pero no ha querido
-Puedo verlo?
-Es que el es tu novio o que?
-NO!! claro que no solo que quiero verlo
-Bueno ya le digo que entre,ah otra cosa un chico llamado Mateo fue a la casa y pregunto por ti.
-Y que le dijiste?
-Que estabas en el colegio, pero en ese instante llamaron a decirme lo de tu accidente y pues el quiso venir conmigo
-Que??!!
-Si el esta afuera también.
No lo podía creer afuera estaban Mat y Felipe que haría?
-Están los dos afuera?
-Si, aunque ese Mateo no hace si no mirar feo a Felipe
Definitivamente este no era mi día, tenia un dolor de cabeza horrible y tenia a el chico que me gustaba y a el chico que me atraía afuera
Toc, Toc
-Amanda por favor di que sigo dormida no quiero hablar con nadie
-Bueno
Entro Felipe, el le pregunto a Amanda si ya había despertado y ella le dijo que no, yo me hacia la dormida, el se acerco y me dijo
-Lucy perdóname, yo no quería lastimarte así, y entiendo si no me quieres volver a hablar es mi culpa que estés así en estos momentos, se que no me oyes pero quiero decirte que hoy fue el mejor día de mi vida.
Yo ni siquiera habia pensado en culpar a Felipe, pero me sentí tan feliz cuando el pronuncio que hoy era el mejor día de su vida, el me dio un beso en la frente y salio de la habitación.
Abrí los ojos y estaba Amanda mirándome sorprendida
-Lucia, esos dos chicos que hay afuera.....
-Si, ya se y me siento muy mal, no se que hacer.
-Amanda por favor dile a Mateo que entre quiero hablar con el
-Bueno
Ella fue a llamarlo, el entro y se veía hermoso, traía una playera blanca y unos jeans negros, su pelo estaba un poco mas largo, se veía muy bien
-Hola mi vida te encuentras bien?
-Si, un poco adolorida pero bien
-No sabes cuanto te he extrañado
-Yo igual
El se acerco a mi y me dio un beso, yo no se lo correspondí, por lo cual me sentí muy mal, no se algo me decía que no podía hacerlo
-Que pasa?
-Perdóname, me siento muy adolorida
-Adolorida, esto tiene que ver con este tal Felipe?
Me sentía muy mal, Mat ya sabia que Felipe existía.
-Mat por que dices eso
-Por que desde que saliste del convento has cambiado demasiado conmigo, ya no me dices amor, ya no me besas ya no me abrazas que pasa?, dime si no me quieres volver a ver dímelo de una buena vez y no te vuelvo a buscar
Empece a llorar, no quería perderlo, pero las cosas ya no eran iguales
-Amor por favor perdóname, no quiero perderte, eres el amor de mi vida.
El me abrazo y yo lo bese, con tanta fuerza que no parecía enferma
-Wow, mi vida, me has dejado sin aliento, ese beso me demuestra que de verdad me quieres, y sabes luchare por tu amor.
-Si mi amor, te prometo que no volveré a cambiar mi actitud.
Estuvimos hablando por un buen rato el me contó sobre como le estaba yendo en el orfanato.
-Amor cuanto tiempo llevo en el hospital?
-Tres días
-Has estado acá tres días sin dormir?
-Si
Se notaba muy cansado
-Amor vete a dormir, no quiero que te enfermes tu
-Bueno
Nos besamos y justo en ese momento entro Felipe....
Mi vida se volvía a enredar....
Llegamos a mi nuevo hogar, era en la misma ciudad, era una casa enorme y llena de lujos, la ciudad era siempre fría, lo frío me encantaba.
-Lucy ya mismo le digo a Matilde que suba tus maletas, tu cuarto es el primero del segundo piso.
Matilde era la empleada de la casa, se veía muy formal. Yo subí a mi nuevo cuarto, era muy grande y tenia una vista muy bonita, tenia un computador y lo primero que hice fue encender el computador y meterme a mi correo, para decirle a Camila donde estaba viviendo y mi nuevo teléfono, estaba viendo correos cuando tocaron la puerta.
-Pasa.
Era Matilde, llego con mis maletas.
-Buenas tardes señorita, bienvenida.
-Gracias, disculpa donde queda el baño?.
-Queda acá enseguida.
-Gracias.
Fui al baño, quería lavarme la cara, estaba un poco dormida.
Ya era hora de comer, me habían llamado, baje y estaba un banquete entero de comida, yo nunca había visto tanta comida solo para 3 personas.
Estaban allí sentados mis padrinos, me preguntaron que tal me habia parecido mi nuevo hogar, y yo les dije que muy bueno, me habia encantado.
Empezamos a comer, hablamos de muchas cosas, cuando termine me fui a dormir, mañana entraría a estudiar a mi nuevo colegio.
A la mañana siguiente me llamo Matilde, tenia que ir a estudiar, me levante , me bañe y en un cajón de mi cuarto estaba el uniforme. Baje a comer y ya estaba servido mi desayuno, cuando termine estaba esperándome Amanda para llevarme a la escuela.
Estaba en la puerta de la escuela, estaba muy nerviosa, Amanda me acompaño a la oficina del directo para que me dieran mi horario, luego me despedí y me fui a mi primera clase, Español, cuando entre, todos ya estaban allí, le entregue al profesor un papel que me habían puesto a firmar, el me dijo que tomara asiento, solo había un puesto desocupado, perfecto, yo sola en un pupitre, creí que era solo para mi pero estaba equivocada, a los 5 minutos de empezada la clase entro corriendo un chico, era muy lindo, de piel blanca, cabello castaño claro y ojos azules, el profesor le dijo:
-Felipe, vuelves a llegar tarde a clase y no te vuelvo a dejar entrar.
El no le presto atención al profesor pero justamente se sentó al lado mio, olía muy bien.
El profesor empezó la clase y todos estaban en silencio.
-Bueno chicos hoy haremos un trabajo en parejas, se reúnen con su compañero de el lado y escriben un cuento, debe ser mínimo 3 hojas.
El se acerco mas a mi y me dijo:
-Así que eres nueva, me llamo Felipe y tu como te llamas?.
-Lucia.
-Lindo nombre, bueno escribes tu o yo?.
-Como quieras.
-Bueno escribo yo.
Su letra era hermosa, creí que todos los hombres escribían feo pero el no lo hacia así.
-Lucia y en donde estudiabas antes?.
-En un convento-
-Mmmmm así que ibas a ser monja y te arrepentiste.
-No, nunca lo quise.
-Entonces por que estabas en un convento?.
-Es una historia muy larga.
-Bueno después tendremos tiempo para que me la cuentes.
Me sonrío, su sonrisa me recordaba la sonrisa de Mat. Ya habían pasado 3 horas, era el descanso, fui a la cafetería y me senté en una mesa sola, no quería comer nada, solo escuchar musica, estaba escuchando la canción que me recordaba a Mat, cuando sentí que alguien me hablo y mire, era Felipe.
-Por que estas tan sola?.
-Por que no conozco a nadie aquí.
-A verdad, te puedo acompañar?.
-Claro.
-Bueno ahora si cuentame de tu vida.
-Pues vivía en un convento, mis padres murieron en un accidente y ahora vivo con mis padrinos.
-Wow, muy trágica tu historia.
Mostró asombro y tristeza.
-Bueno y tu cuentame de tu vida.
-Bueno pues yo soy un desastre, soy la oveja negra de la familia, todos me tachan del rebelde.
-Jajajajaja.... así que eres un rebelde sin causa..
-Así es, yo de ti no hablaría conmigo..
-Jajajajaja....
-No te rías es enserio, te podría dañar.
Yo no podía de la risa...
-Bueno, digamos que yo no soy tan fácil de influenciar.
Llego una niña muy linda y con uniforme de porrista, a la mesa, se veía furiosa, me miro muy mal y le grito a Felipe:
-Así que ahora eres el que le da la bienvenida a las nuevas, se supone que deberías haber ido al partido a verme.
-Ángela perdón pero tenia cosas mas importantes que hacer, otro día te veo.
Ella se fue furiosa y yo le dije:
-Creo que tu novia esta furiosa.
-Hay si ya lo se, perdón, ella es así no se como la aguanto.
-Si no la aguantas por que estas con ella.
-Por que siempre que le quiero terminar me arma un show.
-Ah, eso es muy malo.
-No le pongas atención.
Sonó el timbre, y se acabo el descanso, el me acompaño a mi salón y el se fue al suyo.
El resto de la jornada se paso muy rápido, estaba a la salida del colegio cuando estaba Ángela allí y me cogió del brazo muy fuertemente.
-Hey que te pasa sueltame.
-Mira, Felipe es mi novio y no te quiero volver a ver cerca de el OK.
-Tranquila, el y yo solo somos amigos.
-Mas te vale.
Me fui para el estacionamiento allí estaba Amanda, llegamos a la casa, Luis y Amanda me preguntaron como me había ido en mi primer día y yo les dije que bien, comí el almuerzo y me fui a mi cuarto, encendí el computador y me metí en mi msn, estaba conectada Camila, me pregunto como me había ido en mi nuevo hogar, y le conté todo, nos pasamos toda la tarde hablando.
Ya era de noche y me fui a dormir, estaba exhausta.
Al día siguiente me arregle y fui muy rápido a la escuela, me había cogido la tarde, ya había empezado la clase me senté rápidamente y Felipe me dijo:
-Así que ya llegas tarde, si ves yo te dije, que hablarme era malo..
Simplemente lo ignore, no quería problemas con su novia. En el descanso el me busco y me dijo:
-Hey que te pasa por que me ignoras yo que te he echo?.
-Eso no era lo que querías que hiciera?.
-Pues no, bueno si pero tu me dijiste que no eras tan fácil de influenciar.
-Simplemente es lo mejor para ti y para mi.
-Que te dijo Ángela?.
No sabia como se había dado cuenta de que ella me dijo algo, pero simplemente le dije:
-Ella no me quería a tu lado.
En ese instante llego Ángela a nuestra mesa.
-Que te dije idiota.
-Ángela primero que todo respeta a Lucy y segundo tu no eres nadie para decidir con quien hablo o no, me canse de tus celos y actitud absurda así que terminamos OK.
-Felipe tu no me puedes hacer esto y menos por esta estúpida, que ni linda es.
Ángela me había echo enojar..
-Perdón, mira chica a mi me respetar, tu novio y yo no tenemos nada si que no te metas conmigo, yo mejor me voy, arreglen sus problemas ustedes.
-Si largate.
-No!! Lucy no te vallas la que se tiene que ir es Ángela, además Lucy es mas hermosa que tu, por eso le tienes envidia.
Ángela se fue furiosa y llorando , yo no sabia que hacer, Felipe era lindo y creía que era hermosa, además había terminado con su novia por mi culpa, me sentía un poco mal.
-Lucy enserio perdoname por esto, esa vieja esta loca.
-Tranquilo, no es tu culpa.
Me dio un beso en la mejilla y me fui a mi salón, había terminado el descanso, ese beso me hizo sonrojar un poco, el resto del día se me hizo muy corto.
En la noche no hacia si no pensar en Felipe, no sabia por que lo hacia, me sentía muy mal, yo le había prometido Mat que siempre lo amaría, pero cada día se hacia mas lejano el encuentro entre Mat y yo, mi esperanza se iba perdiendo...
Llego a mi cuarto Matilda con un teléfono en la mano.
-Lucia te necesitan al teléfono.
Yo conteste
-Alo
-Hola mi amor, pensé que nunca volvería a hablar contigo.
No podía creer, era Mat, justo cuando perdía la esperanza de volverlo a ver.
-Hola Mat.
-Amor que te pasa, no estas feliz de hablar conmigo?.
-No me pasa nada mi vida, solo que estoy sorprendida.
Nos pasamos hablando casi toda la noche, apenas colgué mi cabeza era un desastre, tenia a dos hombres en ella y no sabia que hacer...
Mi pasado me perseguía, y mi presente me acechaba....
Estaba viviendo el mejor instante de mi vida, todo parecia un sueño del que no quería despertar...
-¡Que esta pasando aquí Lucia?!
Era Maria, nos había visto besándonos, había vuelto a mi triste realidad donde nada era perfecto.
-Maria perdón yo la obligue.
Estaba asombrada Mat se había echado la culpa de todo, yo ni podía hablar.
-Maria no es cierto, nadie me obligo yo así lo quise.
-Lucia vete ya mismo a tu cuarto, y Mateo te vas conmigo a mi oficina.
No podía hacer nada mas que ir a mi cuarto. Cuando llegue me sentía mal, que le podría hacer Maria a Mat?.
Al día siguiente fui a buscar a Mat al cuarto de aseo y no lo vi, le pregunte al otro señor del aseo y me dijo que a Mat lo habían mandado de nuevo al orfanato y que se quería despedir de mi, pero Maria no lo había dejado, y solo me había podido dejar una carta, la cual me entrego.
Yo no podía creer lo que estaba pasando, todo era tan perfecto.
Fui a mi cuarto y leí la carta que decía:
-Amor se que estábamos en nuestro mejor momento, pero ni Maria ni nadie puede impedir que nos queramos, se que tu me quieres como yo a ti, y me lo demostrarte con ese beso, es muy triste para mi despedirme justo ahora, pero luchare por tu amor, y nunca te dejare de querer, se que el tiempo nos volverá a unir.
NUNCA OLVIDES QUE TE AMO!!
MAT ♥
Me sentía tan feliz por que Mat estaba dispuesto a luchar por mi amor, pero tan triste por que nos habían separado. Escondí la carta y fui al comedor, Maria estaba allí y yo simplemente la ignore, ella me dijo:
-No creas que ignorándome vas a ocultar tu realidad, tienes que entender que lo que hice lo hice por tu bien y...
Yo la interrumpí estaba furiosa...
-Tu que sabes que es lo mejor para mi, ahh, estoy cansada de hacer lo que la gente cree correcto para mi, no soy feliz, acabas de tomar la peor decisión, Mat era muy especial para mi, el era el único que me entendía y apoyaba.
Me pare del comedor y me fui a mi habitación, no quería hablar con nadie, esa semana fue la peor de mi vida me sentía muy sola.
El lunes siguiente llegaron todas las niñas al convento, Camila estaba muy feliz y quería contarme todo sobre sus vacaciones, me abrazo y me pregunto:
-Lucy que te pasa por que estas tan triste?.
Yo le conté todo y ella también estaba furiosa con Maria, no podía creer que ella haya echo eso.
Ya eran kas 3:00pm y estaban tocando la puerta.
-Siga.
Era Maria, no quería hablar con ella pero que podía hacer.
-Lucia se que estas enojada conmigo pero hice lo correcto, vine a decirte que tus padrinos pidieron tu custodia y están aquí para hablar contigo, quieren que te vallas con ellos.
Yo hablaba muy poco con mis padrinos, pero ellos siempre me mandaban regalos, ellos me querían mucho.
Yo baje y estaban allí, Amanda y Luis, mis padrinos, ellos me abrazaron muy felices de verme, Amanda siempre fue como una segunda madre para mi, por que siempre me aconsejaba, y Luis siempre estaba mandándome regalos, yo era como una hija para el.
-Lucia, sentimos mucho lo de tus padres, pero por eso estamos aquí, para apoyarte, perdonanos por tardar tanto en venir a verte pero nos encontrábamos en París de vacaciones, pero queremos proponerte algo.
-Y que seria?.
Amanda me empezó a decir:
-Lucy yo se que acá no eres feliz y quiero proponerte que te vallas a vivir con nosotros, que estudies en un colegio normal y que empieces una nueva vida.
Yo no sabia que decirle, lo único que me ataba a este lugar era Mat y el no volvería así que muy feliz le dije que si.
-Bueno hija ve empacar tus cosas que nos vamos.
Yo fui corriendo a mi cuarto, empaque todas mis cosas, cuando estaba terminando entro Camila.
-Que haces, a donde vas?.
-Me voy a vivir con mis padrinos, creo que es lo mejor para mi.
-Amiga espero que con ellos si seas feliz, sabes que acá sigues teniendo una amiga con quien contar.
Me abrazo y nos despedimos.
-Cami, por favor si ves algún día a Mat dile que lo amo y le das mis datos, yo te los mandare apenas llegue.
-Claro amiga, tenlo por seguro que así lo haré.
Nos volvimos a abrazar, y luego me ayudo a bajar mis maletas, abajo estaba Maria, se notaba muy triste, y al lado Amanda y Luis, ellos si estaban muy felices.
Me despedí de Maria, ella me pidió disculpas, no quería que las cosas terminaran así...
Al salir mire hacia atrás, había dejado muchas experiencias en ese lugar, y sobre todo, la historia de amor mas hermosa de toda mi vida.
Solo sabia dos cosas, estaba dispuesta a empezar una nueva vida y a buscar a Mat, sabia que siempre lo amaría...
-Mat metete debajo de la cama, allí no te encontraran-
Después de decir eso, abrí la puerta, Maria tenia cara de asombro y tristeza, creí que me había escuchado hablando con Mat, pero no era eso, ella me dijo:
-Hija puedo pasar?-
-Claro-
Eso era la ultimo que quería que hiciera pero no podía prohibircelo.
-Tengo que contarte algo necesito que te sientes en tu cama, tenemos que hablar-
Me tembló todo el cuerpo cuando dijo eso, Mat estaba debajo, que haría si lo veía allí.
-Lo que te tengo que decir es muy duro para mi pero creo que sera mas duro para ti, me acabaron de llamar y me dijeron que tus padres sufrieron un accidente aéreo y que lamentablemente murieron-
-Que?-
Estaba en shoc, no podía decir nada mas, empezaron a salí lágrimas de mis ojos, era una sensación extraña, sentía un vacío en mi pecho.
Maria me abrazo, y me trato de consolar:
-Hija quieres estar sola, o me quedo contigo?-
-Por favor dejame sola-
Ella salio, y Mat inmediatamente salio de abajo de la cama y me abrazo.
-Lucy estaré acá para apoyarte en todo, siempre contaras conmigo-
Esas palabras de verdad me hicieron sentir un poco mejor pero no dejaba de llorar, mis padres casi no estuvieron cerca de mi pero eran mis padres e igual los quería.
Estuve llorando toda la tarde y Mat estuvo conmigo, el me aconsejo y me apoyo el sabia que se sentía eso, sus padres también habían muerto en un accidente.
Era de noche y llego Camila, ella me vio llorando e inmediatamente miro a Mat y le dijo:
-Que diablos le hiciste?-
-Nada-
-Entonces que le paso?-
-Sus padres murieron en un accidente-
Ella me miro con cara de tristeza y me abrazo.
-Mat creo que es mejor que te vallas, Maria me pregunto ahora que si te había visto-
-Por favor Camila no la quiero dejar sola-
-Mat es mejor que te vallas yo estaré bien, Camila esta conmigo-
No quería que el se fuera, pero tampoco quería que lo regañaran por mi culpa, así que el se fue.
-Necesitas algo?-
-No gracias Cami quiero tratar de dormir un poco-
Sabia perfectamente que no lo lograría pero no quería hablar, así que me quede toda la noche despierta, llore toda la noche.
Al día siguiente, estaba destrozada tanto mental como físicamente, no sabia que iba a pasar conmigo.
-Buenos días como sigues?-
Era Maria, no quería ver a nadie pero todas las niñas querían consolarme.
-No muy bien pero que se puede hacer-
-Maria puedo faltar hoy a clases, no quiero ver a nadie-
-Bueno hija, pero recuerda que estancarte en tu cuarto no es la mejor solución, tus padres ya están con Dios, y yo se que ellos no querían verte así-
Ella salio de mi cuarto, y yo me levante y empecé a ver fotos de mis padres y a recordar momentos del poco tiempo que pase con ellos.
Ya eran las 12:30pm, tenia que bajar a comer, pero no quería, sabia que si no bajaba Maria me regañaría así que me bañe, y me arregle un poco, cuando baje todas las niñas del convento se quedaron mirándome, me sentí muy incomoda, pero solo podía ignorarlas, sentí que alguien me abrazo por detrás cuando mire era Camila.
-Hola, tengo un puesto especial para ti-
-Gracias-
Comí rápido mi comida y no hable con nadie, después fui a la antigua capilla, quería estar solo y ese era el único lugar donde podría estarlo.
Estaba algo oscuro pero no me daba miedo, pase toda la tarde allí y en la noche fui a mi cuarto a dormir, Camila ya estaba durmiendo.
El tiempo paso y después de 6 largos meses, ya no me dolía tanto la partida de mis padres, me distancie mucho de Mat y de Cami, parecía muerta en vida, no hablaba con nadie y no comía casi, todos los días eran monótonos, Mat al principio siempre se me acercaba pero yo siempre le decía que quería estar sola, el se canso de mis desprecios y no volvió a buscarme.
Ya era fin de año y las niñas se habían ido a sus hogares a festejar año nuevo, yo no tenia a donde ir a si que me quedé en el convento, solamente estábamos Mat, Maria el celador y yo.
Baje a ver a mis plantas, hace mucho no las veía, estaba sentada al lado de ellas hablándoles cuando alguien me dijo:
-Ahora prefieres hablarle a las plantas y no a los humanos no?-
Voltee y vi que era Mat.
-Ellas simplemente me escuchan-
-Hola, ahora si quieren hablar conmigo o no?-
-Claro que si nunca quise dejar de hablarte, solo necesitaba un tiempo a solas para reflexionar-
-Bueno, ya extrañaba hablarte-
-Yo igual-
-Lucy por cierto quiero hablar contigo de algo, que desde hace mucho tiempo me pasa-
-Dime-
-Es que no se como decírtelo-
El se sonrojo, que seria tan importante como para que el se sonrojara.
-Pues normal, solo dime y ya-
-Buen mira Lucy, durante todo este tiempo en que no hablamos, me sentí muy mal, todas las noches soñé contigo, no había momento en que no pensara en ti y la verdad creo que estoy enamorado de ti-
Yo estaba en shoc, no sabia que decirle, como un niño tan hermoso podía enamorarse de mi?.
Simplemente lo abrase y le di un beso, el mejor beso de toda mi vida...
Cuando abro los ojos era de día, mire hacia la cama de Camila pero estaba vacía, recordé que ella estaba con su familia y que podría estar sola en el convento hasta el medio día que llegaran las otras chicas.
Me bañe y baje a desayunar rápidamente, estaba Maria sentada en la ultima silla.
-Hola lucia, como amaneciste?-Me pregunto.
-Bien gracias y usted?-
-Bien-
Desayune lo mas rápido posible y me fui para mi cuarto, prendí mi reproductor de musica y estaba en una canción muy bonita llamada eres el amor de mi vida, no se por que pero cuando la escuche recordé a Mat. Pasaron las horas y me había quedado dormida, cuando abrí los ojos ya había llegado Camila, ella me miro sorprendida y me dijo:
-Quien es ese tal Mat del que tanto hablabas en tus sueños?-
Había soñado con Mat y había hablado dormida estaba en shoc no sabia que decirle.
-Mmmmm Mat?-
-Si Mat-
-Es solo un amigo-
-Bueno, mira si no me quieres contar bueno, pero no trates de engañarme, no soy estúpida.-
Que había dicho que ella no creía lo que yo le decía, lo mejor seria preguntarle.
-Te cuento todo si me dices que dije dormida-
-Bueno, pues decías que no querías alejarte de el que lo querías mucho y otras cosas...-
-Que? Enserio dije eso-
-Si, ahora si cuentame todo, quien es el?-
Nos pasamos lo que quedaba de la tarde hablando y le conté todo demás ella me contó de su vida y pues parecía que eramos amigas, se sentía bien.
Al día siguiente, me tocaba ir a clases, llegue con Camila al salón todas se quedaron mirándonos, les pareció extraño, la primera clase era trigonometría; la detestaba por que no entendía nada.
Las otras clases se pasaron muy rápidas y cuando menos pensé era la 1:00pm.
Camila y yo fuimos al comedor a almorzar pero ya estaba lleno nos sentamos en una esquina, después fui a al jardín de violetas, a escuchar musica, tenia los ojos cerrados cuando sentí que me tocaron la mano, me quite lo audífonos y abrí los ojos era Mat, tenia una sonrisa hermosa y sus ojos brillaban por el sol.
-Hola Lucy, por que estas tan sola?-
-Me gusta estar sola cuando escucho musica-
-Mmm ya que como estas?-
-Bien y tu?-
-Bien.
El se sentó al lado mio y empezamos a hablar.
Me contó de su día, y muchas otras cosas.
Depronto era de noche se me había pasado el tiempo muy ligero como siempre me sucedía, sentí que me llamaron:
-Lucia que hacer tan tarde y con un muchacho ven ya mismo-
Era Maria y sonaba con voz molesta.
-Mat chao, mañana hablamos.
-Bueno yo te busco-
Cuando yo vi a Maria Roja del enojo que tenia agache la mirada y le dije.
-Maria no lo vuelvo a hacer, te prometo que no sabia que horas eran-
-Lucia sabes muy bien que te quiero mucho pero no puedo permitir que hables con ese muchacho, estas en un convento y no es correcto eso, te prohíbo que lo vuelvas a ver-
Yo estaba en shoc no sabia que decirle me prohibió hablar con el ser mas maravilloso que había conocido, y no estaba dispuesta a hacerle caso, pero ella no podría saber mi decisión.
-Bueno Maria no lo volveré a ver-
-Hija espero que me hagas caso y no lo vuelvas a hacer, ve a dormir es tarde-
salí hacia mi habitación y cuando llegue estaba Camila en su cama esperándome:
-Que paso?, por que llegaste tan tarde?-
-Ni te lo imaginas, Maria nos vio y me prohibió volver a hablar con Mat.
-y que piensas hacer?-
-Nada, no pienso hacerle caso a Maria, me he encariñado mucho con el-
-Si es verdad solo no te dejes ver de Maria cuando estés con Mat.-
Nos acostamos a dormir, y tuve un sueño muy malo, que estaba hablando con Mat y Maria nos veía, y a Mat lo echaban del convento por mi culpa, me levante muy asustada.
Ya era de día y me arregle como siempre, fui a clases y en la tarde me senté a hacer mis tareas.
Toc, toc, era mi puerta, la abrí y era Mat, me saludo rápidamente y entro.
-Lucy, ayer después de que Maria nos vio, ella hablo conmigo y me dijo que por mi bien era mejor que no volviéramos a hablar, yo no estoy de acuerdo con ella pero es mejor que nos alejemos un poco, solo si así lo quieres-
Yo me quede sorprendida Mat no quería alejarse de mi, no lo podía creer.
-Si Mat lo mismo me dijo ella-
-Entonces quieres que nos sigamos viendo o no?-
-Claro que si pero tenemos que acordar un lugar donde nadie nos pueda ver-
-bueno yo había pensado que el jardín era un buen lugar pero ya nos vieron ahí, el otro lugar puede ser afuera de la antigua capilla, hay un jardín muy lindo y como se que te gustan las flores, es perfecto-
-A si es un muy buen lugar-
Yo había ido a ese lugar en ocasiones en las cuales me sentía muy triste y quería llorar, nadie iba allí por que decían que había un espíritu por ahí pero en todas las ocasiones en que fui no había nada.
Tocaron la puerta, Mat salto y yo también, quien seria?.
-Hija sal que necesito hablar contigo urgente-
Mat y yo no sabíamos que hacer, detrás de la puerta estaba Maria, que haríamos?.
Cuatro paredes un cuarto simple y sin color, era lo que siempre observaba cuando desde mi cama miraba mi cuarto, era algo que solía hacer cuando las monjas no me ponían a orar, no se por que mis padres me trajeron acá la verdad nunca me han gustado estas cosas pero bueno solo queda la resignación cuando lo que prima no es tu decisión.
Muchas niñas del convento decían que querían ser monjas yo no pensaba igual, y por eso prefería callar y escuchar para no desatar peleas siempre me tachaban de la reservada, de la aburrida y nadie me había conocido verdaderamente, pero preferían hablar sin conocerme primero.
Toc toc sonaba la puerta -puedo- sigue le dije era la madre superior, Maria siempre tan amable conmigo ella era muy especial para mi,
-Lucia quisiera saber si quieres ir a regar las nuevas flores que sembraron están muy lindas-
-Si claro ya voy- siempre me encantaron las flores y por eso cada que llegaban flores nuevas al convento me mandaban a arreglarlas.
Estaba cruzando el patio principal cuando vi las hermosas orquídeas de color rosa que habían al fondo eran muy lindas, solo iba en dirección a ellas cuando sentí un gran golpe que me tumbo al piso, cuando abrí los ojos solo vi la cara de un muchacho moreno, de ojos cafés claros que tenia cara de asustado, me preguntaba muchas cosas aun no reaccionaba.
-como estas, que te paso, contéstame-
-Mmmm, estoy bien gracias-
-perdón iba distraído pero no quise lastimarte-
-tranquilo no te vi, pero que haces en un convento? –
-Mmm tranquila no vine a ser padre ni nada por el estilo solo soy el nuevo chico de mantenimiento-
-bueno creo que es hora de que me ayudes a parame no-
-ah si perdón-
Me extraño mucho ver a un chico en el convento usualmente no los dejan entrar, y los que entran son de mucha edad, pero este era muy joven yo le pondría 16 y además era muy lindo.
-Como te llamas?- Me pregunto
-Lucia y tu?-
-Mateo pero me dicen Mat-
Su sonrisa era hermosa sus dientes blancos brillaban y simplemente era agradable hablar con el aunque no habíamos hablado mucho.
-bueno lucia me tengo que ir pero espero vernos pronto, para que nos conozcamos mejor-
-Mmm si claro, chao-
Seguí mi rumbo hacia las orquídeas y el hacia la oficina de madre superior, lo extraño es que no podía olvidar su sonrisa, simplemente las flores pasaron a segundo plano, las regué con agua ligeramente no las detalle ni les hable como lo hacia habitualmente, solo me fui corriendo hacia mi cuarto.
Cuando llegue a el estaba en la otra cama Camila, ella era una buena chica y siempre trataba de hablarme pero yo la ignoraba no me gustaba hablar con nadie:
-Hola, por que tienes esa cara de felicidad?-
-Felicidad?-
No me había dado cuenta de cómo estaba mi aspecto pero no sabia que contestar.
-Si tienes una sonrisa de oreja a oreja, que te paso?-
-Nada, simplemente llegaron nuevas flores al convento-
No se me ocurrió decir nada mas, obvio no le iba a decir nada de Mateo, no éramos intimas amigas como para hablarle de eso.
-Mmm bueno-
Ella sabia exactamente cuando no quería que me hiciera mas preguntas y por eso simplemente decidió no insistir por mi supuesta cara de felicidad.
En mi cama pensé no prestarle tanta importancia a mateo era un simple chico que vi en una ocasión cualquiera no lo volvería a ver quizás entonces no valía la pena pensar tanto en el.
Al otro día me levante muy temprano para ir como de costumbre a la iglesia del convento no me agradaba mucho pero se volvió una costumbre, cuando llegue estaba sola como siempre por eso siempre iba temprano para no ver a nadie, cuando salía me encontré con mateo pensé que seguiría derecho y no me saludaría pero paso todo lo contrario.
-Hola lucia, como estas?-
-Hola Mateo, bien y tu?-
-bien pero no me digas Mateo simplemente dime Mat-
-Mmm bueno-
-y por que no saliste con tu familia hoy, es domingo-
Había olvidado que los domingos nos dejaban salir con nuestras familias, por que nunca salía ya que mi familia nunca estaba en el país siempre estaba viajando por el mundo en sus negocios tal vez por eso creo que fue que me dejaron acá para que no les molestara.
-bueno, pues mi familia no esta en el país por eso no salgo-
-a bueno si no te molesta podemos hablar esta tarde para que nos conozcamos mejor, conozco un buen lugar aca en el convento-
-no se si estaría bien, las monjas están muy pendientes de mi no creo que me dejen escapar, pero intentare estar ahí-
-bueno de todas maneras te espero en la parte trasera del convento junto a los jardines de violetas-
-claro ahí estare-
-lucia, ven a desayunar-me llamaba Maria
-chao me llaman-
-chao nos vemos a las 3pm-
Mientras iba a desayunar pensaba si ir o no a la cita la verdad no estaba segura pero, si tenia muchas ganas de ir.
-Lucia muchacha por que no venias se te va a enfriar el desayuno, que hice especialmente para ti-
-María no te escuchaba pero bueno gracias por el desayuno se ve muy rico-
La mañana paso muy rápida y cuando menos me lo espere eran las 2:3 pm a media hora de mi casi cita si así se le puede llamar, no sabia si ir o no, muchas cosas pasaban por mi cabeza como, que tal si no iba y me dejaba plantada o que tal si la María no me encontrara en mi cuarto y me encontrara con Mat, al final me decidí y me arregle para ver a Mat.
Cuando llegue al lugar estaba el con una chaqueta de cuero unos jeans y una camisa azul clara se veía muy bien.
-Hola- me dijo
-Hola-
-Luces muy bien lucia-
No sabia que contestar, al chico lindo le parecía que me veía bien en estos jeans y blusa vieja.
-tú también luces muy bien-
-bueno lucia cuantos años tienes?-
-15 y tu?-
-16, y por que estas acá?-
-bueno es difícil, mis padres son grandes empresario y viajan por todo el mundo no tienen tiempo para mi así que decidieron dejarme acá-
-Mmmm ósea que no quieres ser monja?-
-No, quiero ser medica, y tu por que estas acá?-
-Pues mis padres murieron en un accidente y en el orfanato se cansaron de mí, era un poco travieso así que me mandaron a este convento a ayudar con el aseo-
Se veía un tono de tristeza en sus ojos al nombrar a sus padres.
El tiempo pasó y hablamos toda la tarde, el era una persona muy especial para mi, y teníamos muchas cosas en común.
-bueno Mat, es hora de irme-
-Lucy (como me decía de cariño) te acompaño a tu cuarto?-
-no Mat podrían verte nos vemos mañana-
Salí corriendo hacia mi cuarto, todo estaba oscuro y no había nadie mas en el convento que María, el vigilante, Mat y yo así que nadie me vio cuando pase por los corredores hacia mi cuarto, cuando entre encontré todo oscuro, me puse mi piyama y me acosté.
Toda la noche soñé con Mat, fue algo extraño.
La vida de cada persona esta llena de decisiones, yo he tomado muchas, algunas buenas otras malas, pero al final lo que verdaderamente importa es que cada una fue una nueva experiencia, que me han hecho crecer como persona y que me ha ayudado para salir adelante, sin importar todos los obstáculos que me impiden alcanzar mi felicidad.
